El dirigente de los Mets, el dominicano Luis Rojas, fue suspendido por dos partidos y multado con una cantidad no revelada por “discutir de manera excesiva” con uno de los árbitros en la primera entrada del partido del domingo entre Nueva York y los Piratas.
Luego de un batazo de Kevin Newman en la primera entrada, el umpire del plato Jeremy Riggs declaró que la pelota fue buena antes de que el abridor del equipo de Queens, Taijuan Walker, la empujara a territorio de foul, lo que resultó en los Bucaneros anotando tres carreras. Rojas salió a reclamarle airadamente a Riggs y al poco tiempo fue expulsado.
El dominicano empezó a cumplir su suspensión el lunes, con el inicio de una serie de tres compromisos de los Mets contra los Rojos en el Great American Ball Park de Cincinnati.